¿Cómo llegó Trump tan lejos?
Creer que el triunfo de Joe Biden es el final del drama que empezó en enero de 2016 es un ejemplo de espejismo de consecuencias fatales. Pretender que esos millones de votantes desaparecerán del mapa con la toma de posesión de Biden revela una ceguera de cuánto Estados Unidos ha variado en las más recientes generaciones.
El problema no es Trump
El empate, sea cual sea el resultado final, que se ha revelado, no es un fenómeno temporal. El protagonista de la resistencia de Donald Trump no es el inquilino de la Casa Blanca de los últimos cuatro años. El agente real, aunque al final el ganador constitucional sea Joe Biden, es ese sector que durante décadas se consideraba una anormalidad.