La emergencia climática ya es una fuerza que redefine el presente y exige respuestas inmediatas que no se basen en juegos de suma cero entre protección ambiental y desarrollo.
En el contexto de una agenda compartida centrada en el desarrollo sostenible y tecnológico, Brasil y China pueden avanzar hacia asociaciones que fortalezcan sus relaciones bilaterales y su posición global.
Dada la continuidad del flujo migratorio y el crecimiento de la extrema derecha en el país, es probable que la cuestión de la inmigración siga siendo un tema central en el debate político portugués.
En su intento de posicionar a Brasil como un líder global en la acción climática, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva asumió el ambicioso compromiso de poner fin a la deforestación para 2030.
La campaña electoral de Pablo Marçal comparte muchos de los elementos que convirtieron a Milei en presidente de Argentina: discursos anti Estado y antipolítica, fuertes estrategias de comunicación digital y la falta de escrúpulos.