El comunismo fue un rotundo fracaso, tanto desde el punto de vista económico-social como en relación con las libertades básicas y los derechos humanos. El éxito de China se debe precisamente a que no es comunista.
Las ciudades latinoamericanas están trabajando concienzudamente en mejorar sus redes de transporte urbano con fuertes apuestas por la movilidad eléctrica colectiva.
La matriz principal del continente ha sido tradicionalmente hidroeléctrica, pero en los últimos años, se ha observado un crecimiento de su capacidad eólica y fotovoltaica.
El gobierno ecuatoriano ha desarrollado una intensa agenda para dar a conocer los puntos clave para la primera fase de implementación del TLC con China.
El acuerdo entre entre ambos gobiernos sobre la instalación de una base espacial china en la localidad de Bajada del Agrio desataron controversias que persisten hasta hoy dado el secretismo de la negociación.
Las relaciones entre China y América Latina han adquirido una relevancia creciente desde principios del siglo XXI, en un contexto de profundas transformaciones en el orden internacional.