Mientras que en Cuba poco a poco se se impone la idea de la necesidad de democratizar el régimen político, al parecer la tendencia en América Latina marcha en un sentido contrario.
Cuba tal vez constituya el caso más atípico de las autocracias latinoamericanas actuales. Sus antecedentes de elecciones democráticas se remontan al periodo de 1940 a 1950.
Desde el final de la Guerra Fría, el diferendo no es entre los gobiernos de Estados Unidos y Cuba, como pretende la isla, sino entre el exilio y el régimen totalitario cubano.
No parece que las autoridades sean capaces de solucionar el motivo fundamental que favorece el abandono de los cargos locales del Poder Popular: la crisis estructural del régimen político.
Aproximadamente 600.000 cubanos fueron interceptados en la frontera sur desde octubre de 2021, una cifra mayor que cualquier otro éxodo masivo en la historia de Cuba.