América Latina celebrará seis elecciones presidenciales en 2024 y junto con los votos vienen los esfuerzos por confundir a los votantes a través de las encuestas falsas que fabrican resultados con la intención de moldear el humor electoral de los ciudadanos.

Recientemente ha emergido la tendencia del regocijo ante los errores de las predicciones de las encuestas de intención de voto.

El reciente proceso de elección interna de candidatos a la presidencia del partido en el gobierno y la coalición opositora se basó en las encuestas como criterio único de selección.

Las encuestas de opinión pública son fundamentales ya que ofrecen una perspectiva clara sobre el pulso democrático, el impacto de las campañas y las prioridades ciudadanas.

Tras la primera vuelta electoral, la candidata del correísmo, Luisa González, fue la más votada con el 33.1% de los votos.

El interés por las noticias sobre el cambio climático es mayor en América Latina que en cualquier otra parte del mundo.